Never end story.
Narra Ally:
Me desperté a causa de mi alarma, echo que provocó que Justin también se despertaba, jo, hoy se iba, otra vez, odiaba cuando venía solo por el echo de que se tenía que volver a ir. Le abracé un segundo y luego me levanté, fui hacia el baño, y me puse el tejano pitillo y la camiseta básica blanca con las converses y su sudadera de "Still Kidrauhl" luego, me hice una trenza al lado, y salí del baño, el ya estaba vestido.
-Buenos días- dijo y me dio un beso corto en los labios a la vez que me rodeaba la cintura con sus fuertes y voluptuosos brazos.
-Serán buenos para ti- dije apoyando mi cabeza en su pecho.
-No te pongas tristona- dijo apretándome contra el, parecía que no le afectase irse, aunque sabía que lo hacía para que no me pusiese mal.
-Pff...- resoplé -No quiero que te vayas- dije apretándolo contra mi.
-Ni yo- dije, por mi, lo dejaría todo y me quedaría aquí con el siempre -Tengo que acabar la gira cielo- dijo acariciándome la espalda.
-Esto es una mierda- dijo.
-Lo se- le dije, y era cierto, era una verdadera mierda.
-¿Me llamaras cada día?- le pregunté mirándole.
-Te lo prometo- dijo acariciándome la cara.
-¿Desayunas?- me preguntó.
-No- dije yo -Y no me intentes convencer porque no tengo nada de hambre, a parte de que allí siempre me pillo algo- dije sin gana.
-Vale- me dijo el.
El cogió su chaqueta y sus gafas de sol, se las puso, me pasó el brazo por los hombros, cogió mi mochila y se la colgó de un hombro, y salimos de la habitación, le pasé mis brazos por su torso abrazándolo, y así, llegamos hasta su coche. Me senté en el asiento de copiloto, y el a mi lado, arrancó el coche.
-¿Has mirado el Twitter desde ayer por la noche?- le pregunté a Justin, tenía curiosidad de ver que había pasado con su tweet y su foto.
-Pues no- dijo el de lo mas despreocupado.
-La has liado- le volví a repetir.
-Me da igual- dijo el -No es nada de lo que me tenga que esconder- dijo de lo mas seguro posible, le miré satisfecha y sonreí.
-Odio que te vayas- dije enfurruñada.
-Es lo único malo de venir- dijo el -Dentro de nada nos veremos- me dijo.
-Aun no lo se Justin- dije yo, seguro que mi hermano no me dejaba irme con Justin a Atlanta una semana -No te ilusiones mucho- dije desanimada.
-No seas negativa- me pidió el.
-Solo soy realista- lo único que se me da bien, ser realista.
Llegamos al insti, era mas pronto de lo normal, ya había varias personas, y todas se giraron a mirar de quien era, o quien bajaría de ese Lamborghini, aunque algunas niñas ya lo sabían por experiencias pasadas. Justin se bajó del coche, parecía un chulai ja ja, con la chaqueta de piel, las gafas y bajándose del Lamborghini, me encantaba, como lo iba a echar de menos, otra vez...
Vino a mi puerta y me la abrió, yo me bajé, y el fue al maletero a por mi mochila, me la pasó y me la colgué de un hombro, luego me pasó el brazo por los hombros y cerró el coche, y me acompañó hasta la puerta del colegio, todos nos miraban y sobretodo las chicas, y eso me encantaba, así marcaba MI territorio. Justin se apoyó en una pared, y yo encima suyo, el pasó sus brazos por mi cintura, y yo coloqué los míos encima de los suyos.
-Ffff...- resoplé, no quería que se fuese, apreté mas mis brazos contra los suyos.
-¿Pasa algo?- dijo colocando su cabeza en mi hombro.
-No te vayas- dije con la voz rota, de verdad, no quería para nada que se fuese.
-Sabes que no me puedo quedar- dijo el.
-Ya- le dije -Pero aun así, no quiero que lo hagas- dije.
-Ni yo quiero hacerlo- me contestó el.
-Esto es una mierda- dije yo.
-Lo se- dijo me contestó el.
-Tengo ganas de tener ya 18 y pirarme de una puta vez ya de aquí- dije cabreada con el mundo.
-Ya queda menos- dijo el, y me dio un beso en la mejilla, echo que provocó que yo me relajase mucho.
Vi como Diana venía desde lo lejos hacia aquí, era donde yo siempre la esperaba sola, fumándome un piti, pero ahora no estaba sola, estaba con el. Vino y nos saludó.
-Hola- dijo Diana.
-Hola- le respondimos los dos.
-¿Que haces aquí Justin?- preguntó sorprendida de verlo.
-He venido a darle el último adiós- dijo el, giré un poco mi cabeza y le miré.
-Que no me he muerto ni nada de eso ¿eh?- dije, y los tres reímos.
-¿Te vas hoy?- le preguntó Diana a Justin.
-Si- contestó un poco tristón.
-Genial- dijo Diana con ¿Sarcasmo? -Ahora tengo que aguantar las rayadas de dos semanas de la tonta esta y todo por tu culpa Bieber- dijo Diana, yo me reí, y el también.
-Es lo que hay Diana- dije y me encogí de hombros.
La puerta del colegio se abrió y los alumnos empezaron a entrar, Diana entró y me dijo que me esperaba en clase, ahora si que si, tocaba despedirse.
Giré sobre mi misma, y miré a Justin, el tenía la misma mirada que yo, lo sabía era tristeza, solo con mirarle podía adivinar lo que el sentía, y lo mismo le pasaba a el conmigo, con una simple mirada nos lo decíamos todo.
Me acercó a el y nos empezamos a besar, el besó duro bastante, nos separamos y le abracé muy fuerte, como si fuese la última vez que le fuese a ver.
-Te quiero mucho- me dijo el.
-Sabes que yo mas- le contesté.
-Sabes que no- dijo el, y pegó su frente con la mía.
-Sabes que si- le dije, y le dí un pico.
-Te tienes que ir ya- me dijo -No quiero que te castiguen por mi culpa- me dijo acariciándome la cara.
-Voy- dije algo angustiada -te quiero muchísimo- le dije.
Le dí un último beso, y entré al instituto mirándolo, viendo como se volvía de espaldas a su coche, y deseando volver a verlo dentro nada, cosa que me parecía imposible.
El entró en su coche, respiré resignada y una lagrima cayó por mi mejilla, no hacía ni medio minuto que se había ido y ya le echaba de menos, seguí mi caminata hacia la clase ya casi llena y el profesor a punto de entrar, y me senté al lado de Diana, ella no me preguntó nada, solo me abrazó, sabía que era lo mejor, le respondí ese abrazo, y esperé a que el profesor llegase.
-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.
Capítulo 2 del maratón de hoy! :D
-No- dije yo -Y no me intentes convencer porque no tengo nada de hambre, a parte de que allí siempre me pillo algo- dije sin gana.
-Vale- me dijo el.
El cogió su chaqueta y sus gafas de sol, se las puso, me pasó el brazo por los hombros, cogió mi mochila y se la colgó de un hombro, y salimos de la habitación, le pasé mis brazos por su torso abrazándolo, y así, llegamos hasta su coche. Me senté en el asiento de copiloto, y el a mi lado, arrancó el coche.
-¿Has mirado el Twitter desde ayer por la noche?- le pregunté a Justin, tenía curiosidad de ver que había pasado con su tweet y su foto.
-Pues no- dijo el de lo mas despreocupado.
-La has liado- le volví a repetir.
-Me da igual- dijo el -No es nada de lo que me tenga que esconder- dijo de lo mas seguro posible, le miré satisfecha y sonreí.
-Odio que te vayas- dije enfurruñada.
-Es lo único malo de venir- dijo el -Dentro de nada nos veremos- me dijo.
-Aun no lo se Justin- dije yo, seguro que mi hermano no me dejaba irme con Justin a Atlanta una semana -No te ilusiones mucho- dije desanimada.
-No seas negativa- me pidió el.
-Solo soy realista- lo único que se me da bien, ser realista.
Llegamos al insti, era mas pronto de lo normal, ya había varias personas, y todas se giraron a mirar de quien era, o quien bajaría de ese Lamborghini, aunque algunas niñas ya lo sabían por experiencias pasadas. Justin se bajó del coche, parecía un chulai ja ja, con la chaqueta de piel, las gafas y bajándose del Lamborghini, me encantaba, como lo iba a echar de menos, otra vez...
Vino a mi puerta y me la abrió, yo me bajé, y el fue al maletero a por mi mochila, me la pasó y me la colgué de un hombro, luego me pasó el brazo por los hombros y cerró el coche, y me acompañó hasta la puerta del colegio, todos nos miraban y sobretodo las chicas, y eso me encantaba, así marcaba MI territorio. Justin se apoyó en una pared, y yo encima suyo, el pasó sus brazos por mi cintura, y yo coloqué los míos encima de los suyos.
-Ffff...- resoplé, no quería que se fuese, apreté mas mis brazos contra los suyos.
-¿Pasa algo?- dijo colocando su cabeza en mi hombro.
-No te vayas- dije con la voz rota, de verdad, no quería para nada que se fuese.
-Sabes que no me puedo quedar- dijo el.
-Ya- le dije -Pero aun así, no quiero que lo hagas- dije.
-Ni yo quiero hacerlo- me contestó el.
-Esto es una mierda- dije yo.
-Lo se- dijo me contestó el.
-Tengo ganas de tener ya 18 y pirarme de una puta vez ya de aquí- dije cabreada con el mundo.
-Ya queda menos- dijo el, y me dio un beso en la mejilla, echo que provocó que yo me relajase mucho.
Vi como Diana venía desde lo lejos hacia aquí, era donde yo siempre la esperaba sola, fumándome un piti, pero ahora no estaba sola, estaba con el. Vino y nos saludó.
-Hola- dijo Diana.
-Hola- le respondimos los dos.
-¿Que haces aquí Justin?- preguntó sorprendida de verlo.
-He venido a darle el último adiós- dijo el, giré un poco mi cabeza y le miré.
-Que no me he muerto ni nada de eso ¿eh?- dije, y los tres reímos.
-¿Te vas hoy?- le preguntó Diana a Justin.
-Si- contestó un poco tristón.
-Genial- dijo Diana con ¿Sarcasmo? -Ahora tengo que aguantar las rayadas de dos semanas de la tonta esta y todo por tu culpa Bieber- dijo Diana, yo me reí, y el también.
-Es lo que hay Diana- dije y me encogí de hombros.
La puerta del colegio se abrió y los alumnos empezaron a entrar, Diana entró y me dijo que me esperaba en clase, ahora si que si, tocaba despedirse.
Giré sobre mi misma, y miré a Justin, el tenía la misma mirada que yo, lo sabía era tristeza, solo con mirarle podía adivinar lo que el sentía, y lo mismo le pasaba a el conmigo, con una simple mirada nos lo decíamos todo.
Me acercó a el y nos empezamos a besar, el besó duro bastante, nos separamos y le abracé muy fuerte, como si fuese la última vez que le fuese a ver.
-Te quiero mucho- me dijo el.
-Sabes que yo mas- le contesté.
-Sabes que no- dijo el, y pegó su frente con la mía.
-Sabes que si- le dije, y le dí un pico.
-Te tienes que ir ya- me dijo -No quiero que te castiguen por mi culpa- me dijo acariciándome la cara.
-Voy- dije algo angustiada -te quiero muchísimo- le dije.
Le dí un último beso, y entré al instituto mirándolo, viendo como se volvía de espaldas a su coche, y deseando volver a verlo dentro nada, cosa que me parecía imposible.
El entró en su coche, respiré resignada y una lagrima cayó por mi mejilla, no hacía ni medio minuto que se había ido y ya le echaba de menos, seguí mi caminata hacia la clase ya casi llena y el profesor a punto de entrar, y me senté al lado de Diana, ella no me preguntó nada, solo me abrazó, sabía que era lo mejor, le respondí ese abrazo, y esperé a que el profesor llegase.
-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.
Capítulo 2 del maratón de hoy! :D
No hay comentarios:
Publicar un comentario
No seas tímido, comenta y dame tu opinion, y ayúdame a mejorar día a día mi blog, para así tener mas calidad :)
Att;Nerea Camacho