Capítulo 1: 22 de Octubre de 2003 (Parte 1)

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Estábamos papa, mama, Sky y yo, en el coche de camino a la casa en el campo de la abuela, todo iba bien, no había tormenta, ni una nube en el cielo que nos pudiera estropear el maravilloso fin de semana en Tenesee, pero de un momento a otro, el cielo se empezó a encapotar de una manera muy rápida, demasiado como para ser normal, y empezó a llover, vi como papa y mama se hablaban en susurros y se enviaban miradas preocupantes en la parte delantera del coche, a mi me preocupó eso, aunque no demasiado, ya que mi hermana pequeña y yo estábamos hablando sobre quien montaría a Relámpago, el caballo mas rápido de la cuadra de los abuelos, siempre teníamos la misma discusión  aunque siempre acababa ganando Sky, a mi me encantaba Relámpago, además de porque era de un color miel precioso, era muy rápido, pero ese caballo no me soportaba, mas de una vez habíamos tenido que salir corriendo al hospital porque el caballo me había tirado al suelo, pero a Sky nunca, siempre se le acercaba el caballo, y nunca había tenido ningún problema con el, bueno, ni con el, ni con ninguno, Sky tenía una dotación especial con los animales, le encantaban, en especial, los caballos. Pero nuestra discusión cesó en el momento en que un rayo de color verde, si, como lo oís, verde, cayó muy cerca del Suzuki Vitara 4x4 de nuestros padres. Mi hermana me miró con temor en los ojos.

-Ryan ¿Que ha sido eso?- preguntó, cuando vi que una lagrima le recorrió el rostro.

-No lo se- dije yo también muy asustado, pero sin llorar.

Y entonces, una neblina empezó a rodear el coche y los alrededores hasta el punto de no ver nada de nada, había tanta niebla fuera del coche que se veía todo completamente gris, mi hermana seguía llorando, pero en silencio, todos estábamos en silencio, no se oía ni un misero ruido, ya que mi padre había parado el coche por precaución. Mi hermana se giró corriendo hacia su ventana.

-Mama, ahí fuera hay alguien- dijo pegando la cara al frío cristal empañado a causa del frío.

Mis padres se volvieron a cambiar esas miradas tan preocupantes, miré a mi hermana, ella seguía perjurando que había visto moverse una sombra con forma de hombre ahí a fuera, yo solo intentaba calmarla, estaba muy asustada, y a pesar de parecer sereno, yo también lo estaba. Mi padre suspiró.

-Voy a salir- dijo mi padre mirando a mi madre, mi madre derramó na lagrima.

-No Peter- dijo mi madre.

-No me puedo arriesgar a que os pase nada- dijo el quitándose el cinturón, pero mi madre lo agarró de la camiseta, y empezó a llorar.

-No lo hagas- dijo ella.

-Tengo que hacerlo cariño- y mi padre le dio un beso en la frente a mi madre, no entendía nada de nada -Niños, bajo ningún concepto salgáis del coche, por nada del mundo ¿Me habéis entendido?- preguntó mi padre serio, Sky y yo solo asentimos, mi padre abrió la maneta del coche y justo antes de salir, nos dijo -Os quiero, a todos- y salió.

Algo muy malo estaba pasando, mi madre miraba por todos los cristales intentando divisar a mi padre, pero no hubo manera, entonces se escuchó un grito, era le voz de mi padre, lo sabía, conocía demasiado bien a mi padre, mi madre corriendo se puso en el asiento del piloto, y arrancó el coche entre lagrimas, y empezó a coger velocidad, demasiada, mientras Sky seguía llorando.

-Mama ¿Y papa?- preguntaba ella al borde de la histeria.

-Sky, deja a mama, tranquila, papa esta bien- dije yo, agarrándome bien al coche, mi madre iba demasiado rápido.

Y en ese justo momento, noté como pegamos un fuerte golpe contra algo, no sabía que era a causa de la neblina, vi como Sky estaba medio tirada en el asiento de delante suyo, con trozos de cristal clavados por todos lados, tenía los ojos entreabiertos, y mi madre se había chocado contra el cristal delantero del coche, y estaba llena completamente de sangre y con los ojos cerrados, yo por mi parte, tenía rasguños en comparación a mi hermana y a mi madre. Salí del coche, para abrir la puerta del piloto y ver a mi madre, pero no pude, ya que divisé al lado del coche a un hombre, vestido de negro totalmente, con una chaqueta larga, y ojos verdes muy profundos, tenía la mirada clavada en mi, su mirada era muy intimidante, se empezó a acercar a mi.

-No... No te acerques- dije.

Sus ojos eran del mismo verde del rayo de antes, si, tal vez yo sea un paranoico por la situación  pero me jugaría el cuello a que es el mismo verde. El hombre siguió avanzando hasta tenerlo a medio metro de distancia de mi. Tenía mucho miedo, era un simple niño de 9 años, que acababa de ver morir a su madre, y su hermana estaba en estado muy grave. El hombre solo dijo:

-Así que este es el famoso Ryan Grace- dijo observándome de cuerpo entero, yo solo le miraba, no sabía que hacer -Que pena ¿no?- dijo mirando ahora el cristal roto,a través del cual veía a mi madre tendida en su asiento, a mi hermana mirándome.

-¿Que?- conseguí articular yo, osea, que el sabía algo de todo esto.

-¿Es que no me reconoces joven Ryan?- preguntó con tono de sorpresa.

-No se quien eres- dije con miedo.

-Soy Adam, Ryan- dijo el con una sonrisa malévola.

Este era el tío que intentó secuestrar a mi hermana cuando solo tenía un mes, y luego me intentó matar a mi, por el echo de ser diferente. Os explicaré de que estoy hablando, hay ciertas personas en todas partes de este mundo que nacen con un tipo de dotaciones especiales que el resto de personas no tienen, yo soy una de esas personas, las cuales nos hacen llamar mutantes, se que suena un poco a lo Monstruo del Lago Ness, pero es por el simple echo de que tenemos capacidades que el resto de personas no tienen. Hay de tres tipos: de clase 4, que son la gran mayoría, ellos tienen la capacidad de levitar objetos y hacer conjuraciones, que son un tipo de hechizos a lo Harry Potter, pero mentalmente, luego están los de clase 5: ellos tienen la capacidad de,a parte de hacer levitar objetos, pueden levitar cualquier cosa, hacer conjuraciones, y leer la mente, pero solo, si tienen contacto, es decir, si se tocan, y solo pueden entre ellos, luego estamos los de clase 6: somos muy pocos en el mundo, tal vez seamos 20 o 30, no mas, tenemos la capacidad de leer la mente a cualquier persona solo con haber hablado una vez con ella, y entre nosotros no podemos, también podemos hacer conjuraciones, levitar cualquier cosa y manifestar nuestros estados de ánimo en el exterior. Yo soy clase 6, igual que mi hermana, solo que ella no lo sabe, ella no sabe nada de todo este mundo, ya se enterará cuando le toque, muchas veces viene a mi habitación y me cuenta que le pasan cosas raras, que por la noche oye voces en su cabeza... Y cosas por el estilo, y dice que no se lo quiere contar a mama y a papa, por si la llaman loca, y me cuesta mentirle de esta manera. 

Adam, me miró desafiante.

-Es una pena que tenga que acabar con alguien con tanto poder como tú- dijo -Pero bueno, son los gajes del oficio- suspiró, y se alejó varios pasos de mi.

Entonces colocó una mano sobre su frente y la otra la extendió en dirección a mi, y cerró los ojos con fuerza, y en ese momento de la niebla emanó un rayo exactamente igual al de antes, el rayo iba en dirección a tocarme, pero no se como, mi hermana apareció de la nada y el rayo le impactó a ella, ella se había interpuesto para que a mi no me pasase nada, su cuerpo cayó lacio al suelo, estaba muy pálida, me senté a su lado, y le agarré la cara entre mis manos, tenía los labios morados y estaba la helada... No, no podía ser cierto...

-¿¡QUE LE HAS HECHO!?- le pregunté entre lagrimas y chillando.

-Opss...- dijo llevándose la mano a la boca -Lo siento- dijo riendo -Esa muerte súbita iba para ti- dijo riéndose de una manera... ¿Había matado a mi hermana y se estaba riendo?.

La furia recorría mi cuerpo, la neblina se desvaneció y empezó a llover muy fuerte, vi que estábamos en un bosque, vi como Adam miró preocupado a su alrededor y se desvaneció con cara de preocupado, y a lo lejos, pude divisar las sombras de un grupo de unas 5 o 6 personas, que en menos de 10 segundos estaban a mi lado. Un señor muy alto, y con pelo castaño oscuro, me pasó un chaqueta alrededor de mis hombros, yo estaba llorando, al lado de mi hermana, le estaba aguantando la mano helada. El hombro se puso de rodillas a mi lado, y le tocó la cara a Sky, puso cara de incertidumbre, como de sorpresa, y me cogió de los hombros, y me levantó a su altura.


-Tranquilo chico- dijo apretándome contra el, intentando calmar mi llanto.
-Ahora te llevaremos aun lugar seguro- dijo una mujer con una capa roja.


Y desde ese día, no volví a saber nada mas de mi familia, todo acabó ahí para mi, ahora con mis 16 años, estoy estudiando en el único internado del mundo para mutantes del mundo entero, esta en un isla al lado de Inglaterra, a dos horas de Cape Cornwall en un barco que va exclusivamente hasta la isla Hooligan, allí se encuentra el mayor campus establecido con todo tipos de mutantes, de todo tipo de clases. Allí esta mi nueva vida, no tengo a mi familia cerca, pero por lo menos, tengo unos amigos que son como yo, que me entienden, y que me quieren.


PD: +4 coments. y segunda parte del cap.