viernes, 30 de diciembre de 2011

Capítulo 15: Flip.

Maratón [5/8]
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La clase de Audiovisual pasó rápida, me iba a despedir de Justin, estábamos los dos de pie en la sala, Lorraine vino a mi lado.

-¿Nos vamos?- me preguntó ella.
-Si- dije yo, miré a Justin y le sonreí.
-Adiós Jason- le dije, y hizo algo que me sorprendió muchísimo.

Me dio un abrazo, me quedé flipando, yo no sabía que hacer, me sonrojé muchísimo, y claro, como no, le respondí ese mini abrazo que duró apenas unos 5 segundos, pero a mi me parecieron 5 horas, el tiempo se detuvo, y no entendí porque, sentí algo raro en mi pecho, me soltó y me dijo "Adiós" con una sonrisa triunfante en su cara, yo debía estar rojísima, porque Lorraine me cojió del brazo y me dijo:

-Estas como un tomate nena- dijo ella, y me parece que me sonrojé mas aun.
-Déjame- dije yo.

Ella solo rió, y las siguientes dos horas pasaron volando, todas las chicas fuimos al vestuario y nos pusimos los chándal, yo me hice una coleta alta, me encantaba como me quedaba. Salimos hacia el pabellón, y vi que los chavales estaban con una pelota. El profesor pitó y todos se acercaron a nosotros, y hicimos un circulo en el suelo, vi que estaban mi hermano, Chaz, Jason, David, Chris... No conocía a mas, había mas chicos que me sonaban de vista de mis clases, el profesor empezó a hablar sobre la actividad de hoy.

-Bueno chicos, hoy vamos a trabajar resistencia y flexibilidad ¿vale?- dijo y las chicas pusieron caras de asco, la de los chicos era neutral.
-¿Con eso a que se refiere?- preguntó una chica bajita y un poco regordeta pelirroja de mi clase.
-Lo explicaré en un lenguaje claro- dijo, y todos reímos -Volteretas y todo el rollo ese- y se rolló un "Puaj" muy general -A ver...- dijo el profesor -Empezaremos con algo fácil ¿Quien sabe hacer la voltereta?- preguntó, y casi toda la clase levantamos la mano.

Por suerte, yo era muy flexible y sabía hacer de todo, y bueno... Supongo que los 3 años de gimnasia rítmica también ayudaron, yo era muy ágil y todo ese rollo me encantaba.

-¿Y la rueda?- preguntó, las manos se recudieron a la mitad, pero seguían habiendo bastantes -¿El pino y vertical?- preguntó el profesor, las mismas manos se mantenían alzadas -Esto ya es un poco mas difícil ¿El Flic Flac?- preguntó y ahora solo había una mano alzada, la mía.

Me dí cuenta de que era la única porque miré a mi alrededor y todos me miraban expectantes, sobre todo, los chicos, mi hermano mató a varios con la mirada.

-¿Sabes hacer el Flic Flac?- preguntó muy entusiasmado.
-Si- dije algo tímida.
-Ven- dijo el profesor.

Que vergüenza ¿Me haría hacerlo? Espero y deseo que no. Me levanté del suelo, y me puse al lado del profe.

-¿Te importaría hacernos una demostración?- preguntó.
-Es que...- dije yo, muy tímida me daba mucha vergüenza ¿Y si me salía mal?
-Por favor- rogó el.

No pude decirle que no, me alegé un poco de el, hacía muchísimo tiempo que no hacía el Flic Flac. Miré con miedo al grupo de 25 personas, ahora 24 que me miraba expectante, algunos me transmitían miedo, otros vergüenza, otros desconfianza... Pasé por los ojos de todos mis compañeros uno a uno hasta llegar a los de el, a esos profundos ojos miel, no eran de un marrón corriente oscuro o claro, no, era un color marrón caramelo muy claro tirando a una tonalidad oscura de caramelo... Si, me emancipaba con los ojos de ese chico... Es que... Es que... Me encantaban, eran preciosos. 


No se de donde saqué la fuerza para hacerlo, pero tras estarme varios segundos observando sus hermosos ojos, me vi con la suficiente confianza de realizar ese Flic Flac, tan ansiado por mi profesor. 


Y sin mas, lo hice, y milagrosamente salí sana y salva, y con aplausos por parte de mi clase y mi profesor, y con caras de sorpresa a mi alrededor, me volví a sentar en el hueco que había ocupado anteriormente, muy sonrojada, pero a la vez orgullosa de haber demostrado que sabía hacer bien las cosas.


La clase continuó, y por suerte, no lo tuve que hacer mas, bueno, si, lo tuve que hacer mas, pero nadie me prestaba tanta atención, hicimos mas acrobacias y cosas de esas. Me fui a sentar a un banco, estaba exhausta, alguien se sentó a mi lado, era Jane, la chica del otro día, la que nos pidió que fuéramos con ella a la fiesta, me sentía bien con ella, parecía muy amigable.


-¿Como te encuentras?- me preguntó.
-Ahora bien- le sonreí para parecer convincente -Gracias- contesté.
-De nada- dijo ella, y me sonrió -Es increíble eso que has echo antes- me dijo.
-Gracias- me sonrojé, no estaba acostumbrada a esto, todavía no.
-Una cosa...- me dijo ella -El viernes Stacy no vendrá conmigo a la fiesta- dijo con ¿Tristeza? en la cara.
-¿Por que?- le pregunté, me preocupó su expresión. 
-Me he enfadado con ella- dijo -Pero aun así, os pasaré a buscar a ti y a Lo ¿Si?- me dijo ella.
-Vale- dijo, el profesor, hizo sonar su silbato.
-¿Vamos?- me preguntó levantándose del banco.
-Si- dije, y me levanté yo también.


Nos acercamos a donde estaban ya caso todos reunidos, nos sentamos otra vez en el suelo a esperar a ver que era lo que iba a decir el profesor.


-Chicos- dijo -La clase de hoy a ido bien, tenéis tiempo libre, si queréis material id a buscarlo  dijo y se alejó a no se donde.


Muchas chicas se sentaron en los bancos a hablar, y a ver como los chicos jugaban a Soccer, en una parte del polideportivo, no me apetecía para nada estarme media hora, que era lo que el profesor dio de tiempo libre, sentada hablando, quería ir a por una pelota de baloncesto y echar unas canastas. 


Vi que a los chicos se les coló la pelota en las gradas, me reí y entré al cobertizo del material en busca de una pelota. Miré por todos lados pero no encontraba gran cosa, vi un montón de pelotas, pero estaba en una estantería muy alta, no llegaba, y encima yo era super bajita, salté varias veces para ver si llegaba, pero ni me acercaba.


Entonces un brazo se alcanzó y cogió una pelota de baloncesto y me la pasó, miré para ver de quien provenía ese brazo bastante fuerte y en forma, descubrí que era de Jason.


-Gracias- dije, y le sonreí.
-De nada chicle- me dijo.
-¿Chicle?- pregunté levantando una ceja.
-Eso parecías cuando te has puesto a pegar botes- dijo, y ambos reímos.
-¿No te vas a poner a hablar de lo buenos que estamos los chicos cuando jugamos a Soccer con todas las demás?- me dijo riendo.
-Encuentro mas interesante meter una pelota por un aro que hacer eso- dije -Ademas ¿Tu que sabes lo que hablan ellas?-e pregunté.
-Tengo 2 razones por las cuales la razón no esta de tu parte- dijo el, se las daba de inteligente ahora, ja ja.
-Deslumbrame Einstein- los dos volvimos a reír.
-Una: no creo que sepan mucho de deportes, y dos: pienasn muy alto- dicho eso despareció por la misma puerta por la cual había entrado segundos antes.


¿Piensan muy alto? Ah... Claro, el oye los pensamientos, y yo también, pero yo no les presto atención a la voces, no me gusta meterme en la mente de la gente, es algo así como invadir su intimidad y no le veo bien, a mi no me gustaría que me lo hiciesen por lo que yo no lo hago a los demás.


Salí con la pelota en la mano, y me arriesgué a tirarla desde medio campo bajo la atenta mirada de todas mis compañeras sentadas en el banco, por suerte para mi entró y no tendría que aguantar ni burlas ni humillaciones por parte de ellas, y volvieron a dirigir sus miradas al partido de soccer.

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Att;Nerea Camacho